“El Hierro”, a sustainable island
Bornholm (Dinamarca), Hawái (Estados Unidos) o El Hierro (España) son algunas de las islas donde cubrir todas las necesidades energéticas de la población con renovables parece posible. Lugares que han puesto en marcha diversas iniciativas para generalizar el uso de las energías renovables y las redes eléctricas inteligentes. Suena utópico pero el pasado 9 de agosto, durante cuatro horas, la isla canaria de El Hierro logró abastecer su demanda eléctrica únicamente con energía limpia procedente de la Central Hidroeólica de Gorona del Viento.
Conocida durante mucho tiempo como el fin del mundo, esta isla hoy se ha convertido en un modelo de desarrollo sostenible. Desde el año 2000 es Reserva de la Biosfera y en 2014, la isla completa fue declarada geoparque por la Unesco. Es la isla más pequeña del archipiélago canario, con 275 kilómetros cuadrados y 10.500 habitantes, y se encuentra inmersa desde 1993 en una estrategia de desarrollo sostenible, que incluye varias iniciativas, desde la introducción de la agricultura biológica hasta la promoción de la arquitectura local.
La mayor apuesta de este plan de desarrollo sostenible es la Central Hidroeólica Gorona del Viento, que incluye un parque eólico, un grupo de bombeo, una central hidroeléctrica, dos depósitos y una planta desaladora. El parque eólico puede suministrar energía eléctrica a la red y, además, alimentar un grupo de bombeo que embalsa agua en un depósito elevado como sistema de almacenamiento energético. De este modo se garantiza el suministro eléctrico y la estabilidad de la red, maximizando el aprovechamiento de los recursos renovables. Con esta plan se prevé que se evitará el consumo anual de 6.000 toneladas de diésel y la emisión a la atmósfera de 18.700 toneladas al año de CO2.
El proyecto también trata de involucrar a la población local, fomentando que los habitantes de la isla participen de forma activa en diferentes propuestas de actuación y en el seguimiento del proyecto con encuentros, talleres y una vía de comunicación permanentemente abierta. Asimismo, la isla quiere convertirse en un foco de atracción para los turistas de gran sensibilidad medioambiental.
Uno de sus grandes atractivos es su origen volcánico. Aunque han pasado más de 200 años desde la última erupción, en El Hierro hay más de 1.000 volcanes y en la actualidad está pasando por un proceso eruptivo submarino. Junto a su paisaje, otros lugares emblemáticos de la isla, como el Centro de Recuperación del Lagarto Gigante de El Hierro, el sabinar o su árbol Garoé, la convierten en un lugar único.
Fuente: Laura Zazo/Grupo Acerta